El miedo es una emoción universal que todos hemos experimentado en algún momento de nuestras vidas. Es tan primitiva como lo es nuestra historia. Sin embargo, el miedo puede manifestarse de diferentes formas y tener diferentes intensidades, desde un leve malestar hasta ataques de pánico exacerbados, lo que nos hace preguntarnos, ¿por qué esto sucede? ¿Los puedo superar?

¿Qué es el miedo y por qué lo sentimos?

Entendemos por miedo a la respuesta natural que da nuestro cerebro ante una situación percibida como peligrosa o amenazante. Al sentir miedo, nuestro cerebro desencadena respuestas fisiológicas y emocionales para enfrentar o evitar esa amenaza.

 Es por ello que se podría decir que sin el miedo nunca hubiéramos llegado a donde estamos. Ha incrementado nuestras posibilidades de supervivencia y por eso sigue presente a día de hoy. 

Diferentes tipos de miedos

Hay que entender primero que el miedo no es un concepto único, sino que abarca una amplia gama de experiencias. Algunos miedos son comunes, como el miedo a las alturas, los espacios cerrados o las arañas. Estos miedos tienen una explicación evolucionista debido a nuestro pasado:

• Tener miedo a las alturas nos hace ser más precavidos y evitar que caigamos por un precipicio. 
• Evitar los espacios cerrados asegura nuestra supervivencia, teniendo en cuenta que estos sitios disponen de menos oxígeno y libertad para vivir. 
• Asustarnos de las arañas nos hace ser más cautos y evitar aquellas especies que pueden ser peligrosas y venenosas. 

Cuando estos miedos específicos se dan en una gran intensidad, dificultando la vida de una persona, se conocen como fobias y pueden generar una intensa ansiedad en las personas que los experimentan. 

Otros tipos de miedos pueden también ser más abstractos y estar relacionados con experiencias traumáticas pasadas o preocupaciones sobre el futuro, como el miedo al fracaso, al rechazo o a la muerte.

¿Puedo haber heredado el miedo y es algo que tengo en mis genes?

El miedo también puede tener un componente genético. Todavía no existe una explicación clara de por qué las fobias se dan en las personas. Ciertas teorías indican que las experiencias negativas o traumáticas, e incluso la educación social, podrían tener un efecto a la hora de desarrollar fobias.

 Otros estudios sugieren que ciertas fobias pueden tener una predisposición hereditaria. Los familiares más cercanos a otros con fobias parecen tener entre 2 y 3 veces más probabilidad de padecer las mismas fobias. Sin embargo, esto no significa que estemos condenados a vivir con ellas. El entorno y las experiencias de vida también desempeñan un papel crucial en cómo se manifiestan nuestros miedos. Comprender esta interacción entre la genética y el entorno nos brinda la oportunidad de trabajar en superar nuestros miedos y vivir una vida más plena. 

Es por esto que conocer tu genética a través de las nuevas tecnologías presentes en el mercado podría ayudarte en el futuro para ser asesorado por todo tipo de profesionales de una manera multidisciplinar.

¿Tus fobias no te dejan avanzar?

Si sufres de fobias, es posible que te encuentres limitado en tu vida diaria. La agorafobia, por ejemplo, puede generar un temor intenso a estar en lugares públicos o situaciones donde escapar pueda resultar difícil o embarazoso. Estos miedos pueden interferir en tus relaciones, tu carrera y tu bienestar general. Sin embargo, es importante recordar que las fobias y los miedos pueden ser tratados eficazmente con la ayuda adecuada.

Una forma efectiva de tratar las fobias específicas es mediante un enfoque terapéutico conocido como terapia de exposición. En algunos casos, el profesional de la salud mental puede recomendar otras terapias complementarias o incluso medicamentos. Es más relevante dirigir nuestros esfuerzos hacia cómo abordar el patrón de evasión que se ha desarrollado a lo largo del tiempo, en lugar de enfocarnos en las causas subyacentes de la fobia.

El objetivo principal del tratamiento es mejorar la calidad de vida, permitiéndonos superar las limitaciones impuestas por nuestras fobias.

Conócete a ti mismo y supera tu miedo

El primer paso para superar el miedo es conocerte a ti mismo. Reflexiona sobre las raíces de tu miedo, qué lo desencadena y cómo te afecta. La autoconciencia te permitirá abordarlos de manera más efectiva y reducir tu ansiedad. 

  A medida que adquirimos una mejor comprensión y control sobre nuestras reacciones, pensamientos y emociones, experimentamos una disminución en la ansiedad y el miedo, liberándonos del dominio que ejercían sobre nuestra vida.

Conocerse a uno mismo no solo implica hacer introspección, también hay características de nosotros mismos que podrían tener en peso en cómo somos, y eso incluye rasgos genéticos que explican parte de nuestra personalidad y cómo de propensos somos al estrés. Conocer tu genética te dará información de esta parte de ti mismo tan oculta.

¿Quieres superar tus temores? Entonces lo mejor es buscar apoyo profesional, como un psicólogo, que puede brindarte las herramientas y estrategias necesarias para enfrentar tus miedos de manera gradual y segura. Recuerda que superar el miedo lleva tiempo y esfuerzo, pero el crecimiento personal y la liberación que obtendrás al enfrentar tus miedos valdrá la pena.